miércoles, 31 de agosto de 2011

Carta abierta de Pablo Milanés a Edmundo García

Pablo Milanés
El cantautor cubano Pablo Milanés, de visita en Miami, ha decidido responder con esta carta abierta a un artículo publicado la semana pasada por el comentarista Edmundo García, en el cual cuestionaba el comportamiento del artista y sus declaraciones a la prensa en Estados Unidos. Resalta su reflexion sobre la reconciliacion del pueblo cubano (dentro y fuera de Cuba) y su posicion critica sobre un tipo de periodismo que vemos en Venezuela (desde la oposicion y desde el oficialismo).

Tomamos del blog CaféFuerte las reflexiones de Milanés en respuesta al conductor del programa radial “La Tarde se Mueve” en Miami. (En respuesta a su artículo del 26 de agosto de 2011)



Edmundo,

Hace años estás intentando hacerme una entrevista sin éxito, hasta el punto de resultar insoportablemente insistente porque además, para colmo, en tu petición posteriormente iban tus entrevistas adjuntas, esas entrevistas que no tuve más remedio que clasificar como “correo no deseado”, para al fin librarme de ellas.

En esa primera ocasión en que nos encontramos, ibas oportunamente mal acompañado y no tuve más remedio que pensar para mis adentros “Dios los cría…”. No obstante te explicaré por qué nunca hubiera hecho una entrevista contigo: vi en ti, con mi intuición natural para esas cosas, las nueve señales del hijo de puta que son, no sé si sabes, clasificaciones que hizo Don Camilo José Cela, en su novela Mazurca para dos muertos y que ha llegado a ser, en la historia, famosa por su visión extraordinaria de lo que es un ser execrable a primera vista. Voy a mostrarte esas nueve señales que son:


1. Pelo ralo
2. Baja estatura y canijo
3. Cara pálida
4. Barba por parroquia
5. Manos blandas, húmedas y frías
6. Mirar huido
7. Voz atiplada
8. Pijo flácido y doméstico
9. Avaricia

Con esta referencia sobra decirte por qué nunca he confiado en ti.

Edmundo, tienes una forma de hacer periodismo que no es tal; coges a tus víctimas (a tus entrevistados), no los indagas, los cuestionas, los destrozas con una autoridad que no sé cuál ser poderoso te ha otorgado y terminas triunfante ante una persona apabullada por el terror de tus palabras que recuerdan un viejo estilo autoritario, ridículo y obsoleto. Esa es a mi juicio la esencia de tu programa.

Cuando leí tu panfleto mi primera reacción fue ver a una niña en la pubertad, asombrada y ruborizada ante su primera menstruación, miedosa de cometer pecado ante una manifestación natural de su desconocido organismo. Esa fue la primera impresión, pero la segunda, fue más solemne y peligrosa: me di cuenta de que no solamente eras todo lo que yo había pensado, sino más aún, estabas ingresando en ese grupo selecto de la ultraderecha miamense que no admite reconciliaciones, críticas y que cuyo único neolítico gesto es romper discos con aplanadoras. Tú, al igual que ellos, no quieres amor, quieres odio, tú al igual que ellos, no quieres reconciliación, quieres rencores y desunión, tú en suma, no quieres al pueblo cubano, ni de allá ni de acá. Edmundo, tú no quieres a nadie y no me hubiera extrañado verte en esa “enorme” turba gritando “Abajo, abajo”, donde sin duda alguna hubieras sido bien recibido.

Has insinuado que la prensa de Miami y España se aprovecha y utiliza mis palabras en vez de beneficiarme de ese espacio para arremeter contra el imperialismo. Edmundo, estás equivocado, soy yo el que me sirvo de esos periódicos para que difundan las entrevistas que en Cuba me están negadas y que sueño con que aparezcan en el Granma y las lea todo el pueblo y que un sólo periodista, uno sólo de los tantos miles que hay en la isla, tenga lo que hay que tener para dar a conocer lo que tantos años llevo expresando; es más, como un punto de partida planteo que tu panfleto y esta carta se publiquen en el Granma y que el pueblo las lea, piense, sepa discernir por si mismo, y de una vez, dónde está la verdad y vayamos por el camino de las libertades individuales que tenemos que rescatar y que tú con tu actitud estás negando.

A mi regreso a La Habana y en concordancia con el párrafo anterior, le digo por este medio a la intelectualidad cubana, a los artistas, a los músicos y a los altos cargos del Estado, que no me susurren más al oído: “estoy de acuerdo contigo pero… ¡imagínate!”. Yo no estoy arrepentido de incinerarme sólo en mi actitud, pero es triste y vergonzoso que haya un silencio cómplice tan funesto como tu manifestación, Edmundo. Estas dos conductas, una en Miami y otra en La Habana, increíblemente al final convergen en su propia contradicción.

Sobre la intelectualidad miamense que comentas que me ha apoyado en sus artículos, te diré que no tengo absolutamente ningún miedo ni prejuicio en recibir una frase amable y receptiva. No soy su compañero de viaje, pero Edmundo, me gusta sumar mientras que a ti te gusta dividir porque de eso vives, para eso estás en esta ciudad.

También te has atrevido a decir que he mal influenciado a artistas del talento y el prestigio de Serrat, Sabina, Víctor Manuel y Ana Belén. No hay duda de que en este terreno también eres un ignorante, debías de saber que Juan Manuel Serrat es uno de los hombres más admirados por su entereza, caballerosidad y su limpieza durante toda su vida, y su posición ante el franquismo arriesgando su carrera y su vida, lo llevó hasta la cima de la dignidad. Que Joaquín Sabina, que a los 23 años se exilió a Inglaterra en su oposición a Franco y a su propio padre, es uno de los artistas más sinceros y honestos que conozco (esto lo sabe bien Fidel) independientemente de su talento. Que Víctor Manuel y Ana, antes de nacer tú, y andar por esos rumbos inciertos, que todos conocemos, para llegar a ser el extremista que eres hoy, pertenecían al Partido Comunista de España, en la época de Franco, y eso, Edmundo, les pudo costar la vida. Esas personas que tú no has respetado, tienen talento propio, criterios propios y no se dejan influenciar por nadie, al contrario porque son ciertamente su talento y sus principios los que han influenciado a medio mundo.

Edmundo, mis 53 años de militancia revolucionaria me otorgan el derecho, que muy pocos ejercen en Cuba, de manifestarme con la libertad que requieran mis principios y esa libertad implica que no tengo ningún compromiso a muerte con los dirigentes cubanos, a los que he admirado y respetado, pero no son Dioses, ni yo soy fanático, y cuando siento que puedo hacer un reproche y decir no, lo digo, sin miedo y sin reservas. Cuando veo que unas señoras vestidas de blanco protestan en la calle y son maltratadas por hombres y mujeres, no puedo por menos que avergonzarme e indignarme y, de algún modo, aunque no estemos de acuerdo absolutamente, solidarizarme con ellas en su dolor; porque lo más vil y lo más cobarde puede ser que una horda de supuestos revolucionarios ataque despiadadamente a estas mujeres. No hay ningún código que defienda eso en el mundo, es más, la violencia de género se queda corta al ver esas salvajes manifestaciones. Estos dos conceptos que te he expresado, pero tú no has entendido -no hay duda de que estás en tu época de infantilismo revolucionario-, no implica que esté en desacuerdo con Fidel y tampoco implica que esté de acuerdo con las Damas de blanco. Pero tú vas al blanco o al negro, (más al negro que al blanco) y no tienes matices y los años irremediablemente te van a hacer aprender lo que es un verdadero revolucionario o inexorablemente vas a ingresar en ese mundo en el que he visto a tantos como tú, vagando, perdido en la nada.

Edmundo, ayer creo que sufriste un revés que no te apliqué yo precisamente, sino los varios miles de personas que asistieron a un recital, carísimo para su bolsillo en crisis, demostrando que es posible el amor, que si anteayer decían “No” y ayer decían “Tal vez”, hoy dijeron “Sí”, un sí contundente, más fuerte que tus sucias y ofensivas palabras.

Edmundo, te invito a que cojas tus maletas y regreses a tu país y allí tengas el valor de denunciar todo lo malo que veas, porque Edmundo, te advierto, esa lucha sí es dura y no te calles como esos miles periodistas de allá, cómplices lamentables del silencio.

En muchas ocasiones he dicho que me sentaré en el portal de mi casa para ver pasar el “cadáver” de mis enemigos, ahí te espero.

Solamente te exijo una cosa: saca mi nombre definitivamente de tu boca irrespetuosa y falsa, son demasiados los méritos que me ha otorgado el pueblo para que un desalmado como tú los manche con sus sucias palabras.

Pablo Milanés
Miami, 29 de agosto de 2011

martes, 30 de agosto de 2011

Solvencia para ocupar cargos de eleccion popular o responsabilidad en el Estado

Para eliminar de una vez por todas, los restos de la burocracia burguesa y su feroz disputa de espacios de poder con ambiciones de lucro sectario y personal, todo el que hoy pretenda ejercer con propósitos edificantes, dignos y revolucionarios cualquier cargo de elección popular o responsabilidad en el Estado, deberá cumplir con tres indispensables credenciales de solvencia. Primero, solvencia ética y moral, que implica el desempeño intachable como sujeto de la vida pública y privada, así como una conducta ejemplar que merezca el respeto de la mayoría de la comunidad a través del tiempo. Segundo, solvencia técnica y científica, lo que significa incuestionables pruebas de aptitud, capacidad y formación en el área donde corresponda trabajar; es decir, la debida combinación de la destreza teórica y la pericia práctica que acreditan la idoneidad del cuadro revolucionario para una determinada tarea, sin que tales conocimientos o aptitudes provengan exclusivamente de la academia formal o una extensa experiencia, sino del verificado equilibrio entre el saber y el hacer. En tercer lugar, está la solvencia política, singular virtud de quienes han mantenido una trayectoria de irrenunciable combate por el pueblo y hoy luchan sin ambigüedades por la unidad de la izquierda y la construcción del socialismo. En definitiva, será el predominio de estas tres credenciales la que reunirá a las mejores mujeres y hombres para consolidar la vanguardia y garantizar el avance revolucionario.

Aclaratoria: incurrí en un lapsus al no citar la fuente de este post. Procedo: En el blog de Jesus Silva consegui este buen resumen. De hecho me dijo en twitter que es atribuido a revolucionarios franceses. Mis excusas a tod@s y en especial a Jesus.

martes, 23 de agosto de 2011

Historia de las reservas de oro monetario en Venezuela

Para que opinemos con base cierta y seria, publico breve historia cronólogica de las reservas de oro en Venezuela. Esta información es útil para crearse una opinión sobre lo que esta sucediendo hoy en día con la decisión del gobierno de "repatriar" las reservas de oro. Pueden ver por ejemplo que en 1942 la mayoría de nuestras reservas de oro estaban en Venezuela. Lo que quiero significar es que de acuerdo a condiciones históricas concretas, es posible que cualquier estado (socialista, capitalista) coloque sus reservas de oro en donde mejor convenga a los intereses nacionales. No es un tema ideológico. Por ejemplo Francia en los 80 solicito a USA que le regresase sus reservas en oro y lo hizo porque estaban en el país del norte desde la Segunda Guerra Mundial para evitar que los alemanes lo robaran. Esa decisión soberana de Francia en aquel entonces permitio, años despues, que dicho oro volviera a tierra gala. ¿Que hizo Francia? Nada mas y nada menos que proteger el oro de la nacion, de todos los franceses, de las garras de Hitler.
El hecho de que el gobierno de Chávez haga lo mismo que Francia en los 80 (pedir que le regresen el oro) no tiene mayor significación, sobre todo cuando vemos que en USA hay una crisis real y profunda, y es lógico que cualquier estado busque proteger sus reservas en oro. Si el gobierno las envía a Rusia, lo hace basado en que este país, junto a Brasil, China e India, muestra una estabilidad en su economía en un contexto de crisis del sistema capitalista, lo que significa que estarían mejor en Rusia o en Brasil que en USA, donde la deuda alcanza el 100% del PIB.  Brasil, Rusia, India y China, entre otros paises, nos guste o no, muestran una fortaleza y estabilidad económica que USA no tiene hoy dia.

Ahora bien, que Chávez use esta decision económica para sacar porvecho político electoral es otra cosa. Es ahí donde la MUD debe ser más cuidadosa, pues sin querer puede caer en la estrategia del régimen que quiere presentarse como el que defiende los intereses nacionales y mostrar a la MUD como los antipatriotas, los entreguistas de nuestro oro, cuando en la realidad este régimen ha sido de los más entreguistas de la historia de Venezuela. Revisen los convenios de empresas mixtas en el sector petrolero para que evidencien nuestra afirmacion. Otro ejemplo de que este regimen beneficia a potencias extranjeras es el nivel de endeudamiento que ha alcanzado en los ultimos años.

A continuacion lean la breve historia de las reservas de oro en Venezuela

 · 1918 Aunque la adopción del oro como patrón numerario fue incorporado en el texto legal de la constitución de 1901, no fue hasta la aprobación de la Ley de Monedas de 1918 cuando se establece el bolívar de oro como unidad monetaria nacional.

· 1939 Se crea el Banco Central de Venezuela (BCV). En el artículo 87de la Ley que crea el BCV, el ente toma a cargo las emisiones de billetes de los bancos privados y estos a su vez debían entregarle al Banco Central el oro que respaldaba dichas emisiones.

 · 1940 Las reservas internacionales eran 31 millones de dólares, de los cuales 29 estaban conformados por oro.

 · 1942 67 millones de dólares (59,78 ton / 36,23 ton de oro) estaban en las bóvedas del BCV y 23,55 toneladas en custodia en el Banco de la Reserva Federal de Nueva York.

 · 1948 Las reservas en oro subieron a 287 toneladas. Venezuela ocupa la octava plaza entre los países con mayores reservas áureas, y el primer lugar entre las naciones latinoamericanas.

 · 1949 El Ministerio de Fomento canceló el mandato conferido al Banco Central para que adquiriera el oro de las minas nacionales. Las reservas aúreas aumentan un 14,9% y ocupan el primer lugar en América Latina, el tercero en el continente y el octavo en el mundo.

· Finales de los 50 A consecuencia de una crisis económica mundial que afectó severamente las exportaciones venezolanas, se redujeron las reservas a 353 toneladas de oro.

 · 1951 Las reservas crecieron 11,51% con respecto al año anterior, debido principalmente al aumento del oro en barras en las bóvedas del BCV, que pasó de Bs 684,1 millones a 778,9 millones.

 · 1959-1960 El desequilibrio en el mercado cambiario hizo necesario recurrir a la conversión de oro por divisas. En 1960, BCV vendió al FMI Bs 427,62 millones.

 · 1961-1967 El acervo se mantuvo constante en 356 toneladas, como consecuencia de la restricción ejercida sobre los egresos de divisas.

· 1968 Hubo un incremento en las cuentas oro en el exterior de 2 millones de dólares y en la posición crediticia neta en el FMI por 8 millones de dólares.

 · 1969-1970 La proporción de oro sobre el total de reservas tiende a reducirse, de 43% y a 38%, en virtud a la transferencia de oro a la posición crediticia neta en el Fondo Monetario Internacional.

 · 1971 Oro en caja y en el exterior: 391 millones dólares.

 · 1974 Se creó la Unidad de Política de Reservas.

 · Finales de los 80 Se trasladan 89,72 toneladas de las bóvedas del BCV al Banco de Inglaterra.

 · 1992 El stock en Caracas alcanzó 154,5 toneladas, equivalente a 43,3% del total de las reservas de oro. En el banco de Inglaterra se atesoraron 101,8 toneladas al cierre de ese año, equivalente a 28,5% del metal aurífero. En el Banco de la Reserva Federal de Nueva York se mantenían 52,2 toneladas (14,7%) y en el Banco Internacional de Pagos se encontraban 47,79% toneladas (13,4%).


Fuente: El libro del oro de Venezuela, Banco Central de Venezuela, Caracas, 2010.