domingo, 18 de diciembre de 2011

El endeudamiento de PDVSA


Tristemente, nuestra principal industria ha venido en una espiral que conlleva a una dañosa expansión de sus cuentas por cobrar (convenios internacionales lesivos) y de las deudas de carácter financiero (Petrobonos). Esas deudas que ahogan a la empresa, traen lamentables pérdidas de divisas a la nación (es decir, afluir de la renta petrolera hacia el extranjero), y ponen sobre las espaldas de la Nación venezolana una espada de Damocles, al comprometer los futuros de ingresos petroleros, en la cancelación de una deuda cuyos intereses se expanden de manera inusitada.



Crecimiento de activos, pero pasivos…
Las multimillonarias propagandas para hacer ver que PDVSA “ahora es del pueblo” o que incluso es “socialista”, se ven generalmente sustentadas con la validación de las reservas internacionales y la (RE)nacionalización de la Faja del Orinoco (inentendible, porque se suponía que todo lo que está debajo del suelo es del Estado). Sin embargo, la leonina opacidad en las cuentas de PDVSA y del gobierno en general (llegando a la cúspide con el enmarañado FONDEN) y las dificultades extremas para que los organismos oficiales presenten datos, han servido para ocultar problemas graves relacionados al funcionamiento estructural de PDVSA.

Una arista sensible de ese funcionar, estriba en el esfuerzo de PDVSA por distribuir divisas a la economía (es decir, entregar dólares para que la burguesía financiera especule) y por cubrir los costos de las necesidades políticas de PDVSA, en su misión de ser vanguardia en la integración energética. Esta voluntad política y su colaboración con la vorágine especulativa, ha llevado a nuestra industria a expandir preocupantemente sus deudas. En el gráfico a continuación vemos en la barra más clara el incremento del pasivo en la industria.





En la barra más oscura del gráfico se observa un sostenido incremento del activo. Ese crecimiento del activo entre los años (1999-2008) ha sido de 165%, pero el incremento del pasivo, ha sido de 305%. Si el pasivo (deuda financiera + cuentas por cobrar) de PDVSA en 1999 alcanzaba la cifra de 16.857 millones de dólares, en el año 2008 la cifra llegó a 68.357 millones de dólares a pesar de ser el año 2008 el de mayor bonanza petrolera de la historia, teniendo en cuenta el ingreso a precios corrientes del total por exportaciones. Grave es que los intereses minoritarios alcancen los 23.158 millones de dólares, cuando en el año 2000 fueron de sólo 7.404 millones de dólares. El pasivo en el año 2009 llegó a 75.212 millones de dólares y tenemos informaciones de expansiones mayores del pasivo que pueden hacer rondar la deuda total (año 2011) a una alarmante cifra aproximada que ronda los 90 mil millones de dólares. Sobre el importe de los intereses y las lóbregas empresas mixtas, hablaremos pronto.


Manuel Sutherland*.

*Coordinador de Formación de la Asociación Latinoamericana de Economía Política Marxista (ALEM).

jueves, 15 de diciembre de 2011

Un canto infinito de paz

Carta a un chavista de la UCV


Chamo, Chama, Ucevistas de todos los tiempos. ¿Hasta cuando?. ¿Hasta cuando vas a seguir alcahueteando la violencia de tus supuestos compañeros? ¿Fuego a la UCV?. ¿Fuego? ¿De verdad quieres que se vaya todo a la mierda? ¿Tu crees que de esa ceniza va a salir que cosa? ¿Diamantes? ¿Corazones buenos e incorruptos?.

Todos somos corresponsables de cómo está el país, pero hoy escribo para ti. Que esto es una guerra, es la razón última que dan los que justifican que la violencia sea una vaina normal. Que se puede insultar, y después escupir, y después caer a cachetadas, y después un botellazo, y después se les da un tiro.

¿Hasta cuando?

Yo entiendo tu postura chavista. De pana que sí la entiendo. Siempre sale algún pajuo a llamarme protochavista cuando explico esto, pero es igual.

Uno es de izquierda. Es decir, uno cree que el mundo cabemos todos. Uno ha sufrido, quizás en carne propia, quizás visto de cerca, como la gente pela bolas, mal. Como la gente es discriminada. Como no queda ninguna opción sino nadar en la miseria. Uno se harta frente a la complicidad o crimen directo de ricos y poderosos.

Hasta ahí estamos.

Luego viene al que llamas comandante, y tu crees que esta es tu única oportunidad, como si fueras caballo viejo. Que el socialismo práctico que puedes tener es este, que hay que apoyarlo y mejorarlo.

Ok. Te creo.

Pero tu sabes bien los niveles de corrupción y de ineficiencia que hay. Tu sabes y conoces de cerca a gente que pelaba bolas, y ahora acumula propiedades, o disfrutan de beneficios groseros. Tu sabes que si baja el petróleo, nos vamos todos a la mierda, porque al final aquí cada vez hay menos comida, y los trabajos que hay son todos pa agarrá lo que caiga. Un negocito, una vaina. En esos andan todos.

Eso sólo es suficiente para el desencanto, pero entiendo que alguno siga ahí. Tan sólo porque las palabras son bonitas, y el comandante es tremendo candidato, de esos que hacen llorar con los sueños que pone por delante. Ojo que dije candidato, pero no presidente. El país se le cae a pedazos. A putos pedazos. Lo de la electricidad y las fallas del Metro son el mejor ejemplo. No me jodas, esa vaina funcionaba.

Pero bueno, supongamos que resistes ahí. Ya no se si por comodidad, o porque queda feo cambiar de opinión, con los amigos rojitos, y en el ambiente en que te mueves.

Llegamos al día de hoy.

¿Vista las fotos de los alrededores del Aula Magna quemándose? ¿No te da dolor en el alma? Si no te indignas y te dueles profundamente, pues mosca, porque el alma se puede perder. Eso sí, pelo a pelo, sin que uno se de cuenta. Uno se despierta, y es un absoluto hijo de puta que es capaz de tolerar la violencia contra sus compatriotas, por razones de fuerza mayor. Mírate en los espejos: Rusia, Corea del Norte, la misma China. !Cuba, Cuba!. ¿Es realmente necesario vivir así de cagao si a uno le da por decirle cuatro vainas al gobierno?.

Tiene que llegar un momento en que digas: hasta aquí.

Tiene que ser posible que le pongas un parao a tus correligionarios, y que les digas que no puede ser.

Esta no es la primera vez que hay bombas lacrimógenas en la UCV. En la Escuela de Trabajo Social es pan nuestro de cada día. Ahí todos se conocen, y saben quienes son. Se sabe quienes generan violencia interna en la UCV. Que no es la misma violencia que ocurre al hacer una manifestación, y que lleguen los pacos, y los manifestantes no se quieran ir, y se arme la comemierda.

Tirar una lacrimógena en un edificio de estudiantes es de una cobardía vergonzosa.

Ponle un parao serio a tus locos. Desautorizalos. Pero que se escuche. No quiero que me mandes un mail ni que lo aceptes en privado. Se hombrecito o mujercita y di claramente lo que piensas, para variar. Porque yo se que bastantes vainas te has tragado.

Te digo más. Esto se puede poner aún más feo fácilmente. Porque esto viene así. Todo ese peo que si la muerte, que si la puta rodilla en tierra, que venceremos, humillaremos, fritaremos, aplastaremos, etc. Toda esa vaina se paga. Toda esa vaina sale y explota en la cara.

Te están quemando la casa. Ese lugar donde podías discutir hasta que las tripas se te pusieran verdes de bilis, pero sin que nadie te impidiera decir lo que pensabas.

Las universidades podrán ser lo que sean, pero en ellas cada quien piensa lo que quiere. O eran, porque ahora, en algunos lugares, la gente se medio caga. Porque si se forma el peo, van a venir los otro con sus bombas, y la otra vez casi me asfixié, y mejor no voy a votar.

Compañero. Compañera. Los llamo así porque si alguna cosa tengo claro es que yo soy universitario, y que la UCV y los ucevistas son mis hermanos. Son mis compañeros de camino, que en algún momento vivieron conmigo que el estudio y el conocimiento sirven para mucho.

Compañero. Compañera. No se pierda en los bosques. Sólo le pido un acto de valentía contra sus intereses inmediatos, contra la puta solidaridad automática.

Deles un parao.

Anonimo....

viernes, 9 de diciembre de 2011

La restauración del capitalismo en la URSS

La Revolución Rusa es, sin duda alguna, uno de los acontecimientos más importantes de la historia contemporánea. En uno de los países menos desarrollados de Europa estallaba la revolución proletaria a inicios del siglo XX.

Mucha especulación se teje alrededor de la Revolución de Octubre, pero uno de los puntos que más confusión ha generado es sobre cuándo se da la restauración del capitalismo en la URSS. Para los intelectuales burgueses, el socialismo se desplomó con la caída del Muro de Berlín, proclamando el “fin de la historia“ y el supuesto triunfo del capitalismo como el sistema histórico social más avanzado.

Esta visión no sólo es defendida por los capitalistas, sino también por los revisionistas que sostienen la idea que la URSS colapsó recién a fines de los ochenta con las reformas impulsadas por Gorbachov y Boris Yeltsin.

Los marxistas debemos realizar un estudio científico de la realidad, es decir basado en hechos objetivos, no en análisis personalistas o metafísicos. Tenemos que dejar atrás los prejuicios y la información falseada. La idea predominante en universidades, colegios y sectores de la pequeña burguesía, es la que sostiene el revisionismo y la burguesía, pero no por ello es a verdadera.

Vamos a realizar un análisis de las diferentes etapas por las que atravesó la revolución rusa.

El Comunismo de Guerra

Esta fue una de las etapas más difíciles puesto que el proletariado ruso después del triunfo de Octubre, fue invadido por los ejércitos de varias potencias europeas y tuvo que vencer además la resistencia de la burguesía y los terratenientes. Destinó sus principales tareas a la supervivencia, confiscó las propiedades de la burguesía y con la creación del Ejército Rojo terminó derrotando la reacción.

La Nueva Política Económica (NEP)

Después de la Guerra Civil interna, la URSS estaba en una crisis económica muy fuerte, y tuvo que lanzar una nueva política para seguir adelante. La industria estaba casi destruida como consecuencia de la guerra interna y el proletariado se estaba desclasando. La NEP fue un conjunto de medidas económicas de corte capitalista destinadas a desarrollar las fuerzas productivas. Es decir estimular el desarrollo industrial y técnico que siente las bases para una economía socialista.

La URSS tenía una base económica más sólida para el capitalismo que para el socialismo. Las medidas de tipo capitalista fueron principalmente: liberalizar el comercio al por menor; libertad para la iniciativa privada en la pequeña y mediana industria; impuesto en especie para los campesinos, quienes podían comerciar y vender sus excedentes; permitir la entrada a ciertas corporaciones internacionales para actividades extractivas; y las empresas socialistas se iban a guiar por el principio de rentabilidad. Lenin nunca escondió que estas medidas eran de corte capitalista, pero sentó un plazo para cumplirlas y poder avanzar hacia el socialismo. Todo esto debía ser hecho bajo la dictadura del proletariado, es decir bajo el control y dirección de la alianza obrero-campesina.

“La expresión de la República Soviética significa la decisión del Poder Soviético de llevar a cabo la transición al socialismo, más en modo alguno el reconocimiento del nuevo régimen económico como socialista” Lenin

Con esta frase Lenin sintetiza dos aspectos fundamentales:

1) La revolución en países atrasados o dependientes del imperialismo, donde no se ha roto con los rezagos feudales o semi feudales y no se ha desarrollado un capitalismo autónomo o nacional con una base industrial propia, no pueden pasar de manera directa al socialismo. Es decir deben atravesar una etapa democrática, de desarrollo industrial y productivo, donde se sienten las bases para una economía socialista.

2) Que dicha etapa debe ser llevada a cabo por la dictadura revolucionaria de la alianza obrero-campesina y no por sectores de la “burguesía nacional”. Al desarrollar una economía dependiente, países como el nuestro desarrollan burguesías burocráticas e intermediarias del capital extranjero, dependen de él y obtienen sus beneficios gracias a él. Esa burguesía nunca romperá ese lazo por su dependencia. Algunos revisionistas como los del Partido Comunista del Ecuador (PCE) sostienen que el gobierno de Correa es democrático y sienta las bases para el socialismo, tergiversando a Lenin, quien sostuvo que ello sólo puede realizarlo la alianza obrero-campesina rompiendo con el imperialismo y la burguesía del país.

La NEP impulsó medidas de corte capitalista que sentaron las bases para la economía socialista en menos tiempo del esperado. A mediados de los veinte empieza a declinar la participación de las compañías privadas, y para 1932 estaban a punto de desaparecer. En 1929 se había dado la supresión total de las relaciones capitalistas en el sector estatal y se abría la posibilidad de adoptar un plan quinquenal.

El principal obstáculo para el desarrollo del socialismo no se lo encontró en la industria sino en la agricultura, en el campo, en la resistencia de los campesinos ricos, quienes habían acumulado grano y poder.

La Colectivización del campo

Esta etapa fue reconocida como una segunda revolución soviética, donde el bastión del capitalismo en la URSS estaba en el campo, es decir en los campesinos ricos –los kúlaks-, quienes se negaron a pagar el impuesto en especie, rehusaron vender grano excepto a precios de usura y estuvieron en actividades de sabotaje y rebeliones, mientras los campesinos pobres se arruinaban cada vez más.

El PCUS decidió lanzar la ofensiva contra los Kúlaks, venciendo la oposición de derecha encabezada por Bujarin, quien se oponía a la colectivización y establecía que era necesario reforzar el desarrollo capitalista; y venciendo la “oposición de izquierda” encabezada por Trotsky quien preveía un supuesto fracaso si no se daba la revolución en un país adelantado, llamando a la pasividad. Se lanzó la consigna “liquidar a los Kúlaks como clase”, despojarlos de su propiedad. Esto inició en 1928 y duró cinco años. En 1933 la NEP había concluido. Dos terceras partes del campesinado trabajaba en granjas colectivas; la industria privada había desaparecido; los principios de dirección socialista habían echado raíces en las empresas estatales; el empleo había sido abolido; y el primer plan quinquenal se había cumplido

La Economía Socialista

La economía socialista en la URSS duró poco más de dos décadas. En esa época se garantizó las necesidades básicas de la población y se desarrolló la producción de manera notable.

Los trabajadores poseían el control de los medios de producción, la fuerza de trabajo ya no era una mercancía que se podía comprar y vender, y no había desempleo. El control de los supervisores y gerentes había disminuido considerablemente. Los medios de producción no podían ser comercializados. Los principios de gestión socialista en las fábricas se habían extendido. Las iniciativas de las masas dieron un impulso trascendental a la URSS, los contra-planes son un ejemplo de ello, los trabajadores elegían métodos distintos a los señalados por los directores para mejorar la producción, o resolvían entre los miembros de cada fábrica incrementar la producción de manera consciente y abnegada.

El socialismo rompe con el factor principal del derecho burgués: la propiedad privada de los medios de producción, pero no puede romper con las deficiencias en la distribución aún, puesto que la gente es remunerada de acuerdo a su trabajo y no a sus necesidades como ocurre en el comunismo.

Lo cierto es que la URSS en la etapa de Stalin pudo salir de la NEP y desarrolló una economía socialista.

En el socialismo no desaparecen las clases sociales, y por lo tanto es posible una restauración capitalista. En el socialismo sigue existiendo la lucha de clases y existen contradicciones.

El Revisionismo en la URSS

Después de la muerte de Stalin en 1953, se da una pugna al interior del PCUS, de donde Nikita Jruchev sale fortalecido y con apoyo del ejército, en especial del mariscal Zhukov, dan un golpe de Estado y se hacen de la dirección del mismo y del partido.

El detonante de esto es el célebre XX Congreso de la URSS, donde Jruchev pronunció su discurso secreto donde acusaba a Stalin de un “monstruo sediento de sangre y culto a la personalidad”. Después de ser uno de los aduladores y “defensores” más grandes de Stalin, atacó a su imagen y con ello el curso que había seguido la URSS en las décadas anteriores. Con esto también fracturó el movimiento comunista internacional y convirtió a la URSS de un país socialista en un país socialimperialista, socialista de palabra pero imperialista de hecho.

El revisionismo es la revisión del marxismo para despojarlo de sus principios fundamentales. Jruchev es el pionero del revisionismo moderno, al autodenominarse marxista leninista pero iniciar el camino para la restauración del capitalismo en la URSS. El revisionismo actúa solapadamente en el socialismo, está tras la cornisa esperando el momento adecuado para usurpar el poder. Se va generando por las deficiencias en la distribución y por la dependencia de técnicos y burócratas enquistados en los órganos de dirección. El lugar de anidamiento de estos nuevos burgueses generalmente está en el Partido y el Estado que es donde se concentra la política general del país. Una vez que se hace del poder realiza reformas de carácter económico, político e ideológico para fortalecerse como clase.

El revisionismo restauró su poder haciendo reformas en contra de los trabajadores, convirtiendo a los medios de producción y a la fuerza de trabajo en mercancías; dotando de un poder ilimitado a gerentes, técnicos y funcionarios, desarrollando una burocracia parasitaria; la política de las empresas estaba guiada por la ganancia y el beneficio, al igual que todos los métodos de gestión y dirección. Proclamó que el Estado y el partido eran de “todo el pueblo”. Además la URSS se convirtió en un país social imperialista (socialista de palabra e imperilista de hecho) ya que imponía su política a los otros países socialistas, que resultaron ser satélites suyos y fichas de ajedrez para sus intentos imperialistas en África y Asia. Se envolvió en una carrera militar, tecnológica y comercial con EEUU. Promulgó la coexistencia pacífica con el imperialismo e impulsó la vía parlamentaria como mecanismo principal de lucha.

La URSS dejó de ser un país socialista el momento en el que se da el golpe de Estado y se empieza a realizar reformas en contra de la clase trabajadora, reformas que impulsaron un capitalismo de Estado que se convertiría en al capitalismo de manera abierta con la Perestroyka y la glassnot, reformas orientadas a disolver la URSS y sentar el capitalismo.

Stalin y su papel

Juzgar a un hombre y a una etapa histórica por rumores o prejuicios es un error. Analizar objetivamente es un deber para los marxistas. Nosotros nos hemos desenvuelto en un ambiente “anti-stalinista” donde se da una crítica de tipo personal y abstracta, basada más en subjetivismos que en hechos concretos.

Stalin fue un continuador de la política de Lenin y llevo a la URSS a convertirse en un país socialista. El PCUS y el pueblo soviético persistieron en la línea de la industrialización socialista y de la colectivización de la agricultura y lograron grandes éxitos en la transformación y edificación socialistas. Dirigidos por Stalin, el PCUS, el pueblo y el Ejército soviéticos libraron arduas batallas y obtuvieron la gran victoria contra el fascismo. La sistematización del leninismo fue un aporte teórico muy importante de Stalin en sus obras: Fundamentos del Leninismo y Cuestiones del Leninismo.

Stalin cometió muchos errores al no aplicar bien el marxismo leninismo. Su error más grande estuvo en señalar que en la URSS ya no existían clases sociales, lo que orientó una política basada en el desarrollo económico, descuidando el aspecto de la educación política y la movilización de las masas, y perdiendo de vista el peligro de la restauración capitalista. Además esto permitió que se descuide el hecho de que una capa de burócratas podía usurpar el poder soviético.

Sin duda los aportes de Stalin pesan más que sus desaciertos.

Marxismo-Leninismo no Stalinismo

El stalinismo es un término inventado por el trotskismo para sabotear la revolución rusa y desconocer toda la etapa histórica de lucha y construcción de ese pueblo. Stalin defendió el socialismo en la URSS, da aportes importantes, pero no desarrolla cualitativamente al marxismo. Nosotros podemos hablar de MARXISMO LENINISMO porque Lenin desarrolla el marxismo en sus tres partes fundamentales.

Al revisionismo fue al que se le cayó el Muro de Berlín encima

Muchos manifiestan que fue la caída del Muro de Berlín el fin del comunismo. Pero lo que cayó en esa época fue un país socialimperialista que dejaba el capitalismo monopolista de Estado para desarrollar un capitalismo más abierto. Los que defendían la URSS desde 1956, ya sea por ingenuidad o pleno conocimiento de causa, no son más que traidores a la revolución que se beneficiaban de las becas y el “apoyo” económico y logístico que daba la URSS y su partido revisionista. Son unos apologistas de la invasión y el saqueo a pueblos de África y Asia y de la explotación y opresión contra los obreros de la misma URSS.

La crítica a la URSS

El Partido Comunista de China y el Partido del Trabajo de Albania criticaron al PCUS y su orientación, señalando que lo que se dio ahí fue un golpe de Estado y la restauración encubierta del capitalismo. Esto generó una disputa en el campo comunista internacional y significó la ruptura de relaciones entre la URSS y China. Esta crítica sostenida de manera consecuente por el PCCh deslindó campos entre los verdaderos marxistas leninistas y los revisionistas.

El estímulo político e ideológico debe echar raíces

Sin duda alguna uno de los principales errores del PCUS fue dejar en segundo plano el aspecto de educación política y elevación del nivel de conciencia de las masas. Concentrarse en el desarrollo económico y productivo. Si bien ello es la base para un país socialista, si no se revolucionan todos los aspectos superestructurales como las ideas, la conciencia y las instituciones, quedará abierta la posibilidad de la restauración. La única forma de frenar ello es con revoluciones culturales dentro del mismo socialismo que se orienten a la aprehensión y adopción de las masas populares del marxismo-leninismo como una herramienta para entender y transformar conscientemente la realidad, como una forma para apropiarse del proceso revolucionario y desenmascarar a los burócratas y enemigos de la revolución. Por ello es muy importante entender la dialéctica materialista a todo nivel, entender que en todo existe contradicción, que ésta se manifiesta también en el partido proletario y que siempre debemos buscar que triunfe la línea correcta.

Conclusión

La revolución rusa fue la primera revolución proletaria dirigida por un Partido Comunista y que demostró en la práctica la verdad de la teoría marxista, confirmando su carácter científico. Demostró que el socialismo no es una utopía, sino algo plenamente realizable. De hecho hubo muchos triunfos y avances, pero también existieron reveses. El triunfo total sobre el capitalismo no está sólo en el socialismo, sino en la instauración del comunismo en todo el mundo. La derrota originada por el golpe de Estado del revisionismo no es sino una muestra de la posibilidad de la restauración, la demostración que en el socialismo aún existen contradicciones que debe resolverse de una manera adecuada. Que en nuestra actividad comunista cotidiana así como en la experiencia histórica y actual del movimiento comunista internacional enfrentaremos un camino de triunfos y derrotas, de avances y retrocesos, hasta el triunfo final y definitivo.

Lo que cayó con el derrumbe del Muro de Berlín no fue el socialismo sino el revisionismo y el capitalismo monopolista de Estado. La URSS dejó de ser un país socialista en 1956 y desde allí su política interior y exterior no fue para alentar a los trabajadores y al pueblo hacia la revolución, sino para desarrollarse como una potencia social – imperialista, de corte colonialista y manipulador.

Nuestro deber es estudiar los hechos históricos de manera objetiva y no guiados por subjetivismos o comentarios maliciosos. Debemos reconocer lo positivo e importante de las revoluciones proletarias y explicarnos científicamente sus errores para poder elevar nuestra táctica y estrategia revolucionaria.

Artículo del Movimiento Vientos del Pueblo